General Viamonte presentó su inventario de emisiones y diagnóstico climático en un encuentro abierto y participativo
En el marco del desarrollo de su Plan Local de Acción Climática (PLAC), el partido de General Viamonte dio un paso clave en su estrategia ambiental con la presentación oficial del Inventario de Gases de Efecto Invernadero (GEI) y el diagnóstico de amenazas y tendencias climáticas. El evento se realizó en el Concejo Deliberante y contó con la presencia del intendente Franco Flexas, integrantes del área de ambiente, concejales, funcionarios y miembros del equipo técnico municipal, en una jornada que combinó la exposición de resultados con un fructífero espacio de intercambio y propuestas.
La presentación estuvo a cargo del Ing. Ricardo Bertolino, director ejecutivo de la Red Argentina de Municipios frente al Cambio Climático (RAMCC), y de Malena Armoa, analista de Planes Locales de Acción Climática en la Secretaría Ejecutiva de la RAMCC. Ambas exposiciones permitieron no solo socializar los resultados del trabajo técnico realizado durante el año 2023, sino también abrir el diálogo hacia la construcción colectiva de soluciones sostenibles.
Un diagnóstico que traza el punto de partida
Durante 2023 se llevó adelante el inventario de emisiones GEI, una herramienta esencial para conocer en detalle la huella de carbono del municipio. Según el enfoque “Básico”, que considera sectores como energía, transporte y residuos, General Viamonte emitió un total de 55.148,76 toneladas de CO₂ equivalente. La mayor parte provino del sector energía (43,4%), seguido por el transporte (33,6%) y los residuos (23,1%).
Además, el municipio elaboró un inventario ampliado “Básico +” que incluye los sectores agrícolas y forestales, así como procesos industriales y transporte transfronterizo. Este análisis más completo arrojó un total de 467.800,02 tCO₂e, con una altísima incidencia del sector AFOLU (Agricultura, Silvicultura y Cambio de Uso del Suelo), que representó el 87,81% de las emisiones totales. La ganadería resultó el principal emisor dentro de este sector.
Si bien las metas de reducción de emisiones se proyectarán sobre el inventario Básico, contar con esta visión más amplia permite diseñar estrategias a largo plazo que involucren al entramado productivo rural y a sus actores.
Tendencias y riesgos: la adaptación como prioridad
En paralelo al inventario, se llevó a cabo un diagnóstico climático que combina registros históricos y proyecciones futuras. Los datos revelan un escenario desafiante: entre 1961 y 2024, la temperatura media anual en el partido aumentó 0,012°C por año, mientras que las precipitaciones alcanzaron los 1.289 mm/año. Las proyecciones a 2039 anticipan un aumento acelerado de la temperatura media (0,6°C al 2039) y variaciones significativas en el régimen hídrico.
El análisis de amenazas permitió identificar fenómenos climáticos con alta probabilidad e impacto, como inundaciones urbanas, olas de calor, tormentas eléctricas, sequías, vientos fuertes, incendios y enfermedades infecciosas. Estos riesgos afectan a múltiples sectores: salud, planificación urbana, agricultura, gestión del agua y suministro eléctrico, entre otros.
Este diagnóstico será fundamental para trazar estrategias de adaptación que reduzcan la vulnerabilidad del territorio y protejan a los sectores más expuestos.
Energía, residuos y naturaleza: las acciones en marcha
La jornada también permitió compartir algunas de las acciones concretas que ya viene desarrollando el municipio como parte de su compromiso climático:
Recambio de luminarias por tecnología LED, con más de 89.000 kgCO₂e evitados anualmente.
Instalación de 50 paneles solares, con una capacidad total de 30 kW/mes.
Plantación de 800 árboles, con absorciones de hasta 613,5 toneladas de CO₂e proyectadas para 2024.
Recuperación de más de 750 toneladas de residuos reciclables entre 2023 y 2024.
Estas iniciativas demuestran que la acción climática local no solo es posible, sino que ya está en marcha.
Un encuentro para construir colectivamente
La presentación fue también una invitación a la participación. Al finalizar las exposiciones, se generó un espacio de debate abierto en el que se respondieron dudas, se compartieron inquietudes y se discutieron ideas para futuras políticas de mitigación y adaptación. El compromiso de las autoridades y la activa intervención de concejales y funcionarios mostró que la gestión climática puede ser transversal, colaborativa y con mirada de largo plazo.
Con estos avances, General Viamonte se posiciona como un municipio que mide para actuar y actúa para transformar. El próximo paso será definir las metas de reducción de emisiones al 2030, con base en los datos presentados y con el mismo espíritu participativo que marcó este primer gran hito.