Tras haber declarado la emergencia climática en enero 2020 y haber conformado el Comité Municipal de Cambio Climático, el gobierno local de Mendoza finalizó su primer Plan Local de Acción Climática (PLAC)  y comenzó a desarrollar acciones de mitigación y adaptación diseí±adas en base al diagnóstico de gases de efecto invernadero (GEI) y a la evaluación de riesgos climáticos.

El Decreto N° 95 de la Municipalidad de Mendoza declara la Emergencia Climática traduciéndose en una reducción de Gases de Efecto Invernadero y se diseí±an y adoptan medidas indispensables en materia de adaptación frente al cambio climático, hoy expresadas en el PLAC. Asimismo, se crean bajo esta normativa instrumentos tales como el Comité Municipal de Cambio Climático (CMCC) de carácter transdisciplinario, el Fondo Verde Municipal de í­ndole financiero y la Mesa de Interacción de Arbolado Municipal, órganos que hacen extensiva la responsabilidad a diversos actores de la comunidad local y suma voluntades para el desarrollo de propuestas a implementar. 

"Desde el municipio entendemos la situación de emergencia vinculada al cambio climático, y manifestamos la necesidad de trabajar en forma urgente, inmediata y sostenida sobre este gran desafí­o que nos une como sociedad. La cercaní­a con el territorio y sobre todo, con nuestros vecinos de la ciudad de Mendoza, constituye un eje central para la implementación de un plan de acción focalizado en dicha problemática. El cambio es ahora", declaró, en este sentido, el intendente Ulpiano Suárez. 

Por su parte, Sebastián Fermani, director municipal de Ambiente: "Desde la Dirección de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza se destaca el trabajo articulado con el equipo técnico de la RAMCC en donde producto del intercambio técnico y de las propuestas elaboradas por el municipio, se pudo desarrollar diferentes estrategias que en materia de polí­tica y gestión climática a escala local se presentan como innovadoras en el actual escenario de lucha frente al cambio climático".
Plan Local de Acción Climática

Plan Local de Acción Climática

La ciudad de Mendoza desde 2013 al dí­a de la fecha realizó seis (6) Inventarios de GEI, proceso que ayudó a mejorar los datos y, en consecuencia, el desarrollo de acciones, que hoy se plasman, también, en el PLAC. Por su parte, en 2018 se adhirió al Pacto Global de Alcaldes por el Clima y la Energí­a (GCoM por su siglas en inglés), formalizando y ratificando su compromiso de transitar un camino hacia la sostenibles y acordando reportar en plataformas internacionales sus actualizaciones, para ser usadas en estudios y comparaciones de ciudades a nivel regional y global.

"En este Plan de Acción Climática planteamos un abordaje integral de las actividades generadoras de emisiones correspondientes a nuestro ejido, para esto elaboramos estrategias correspondientes a mitigación, adaptación y minimización de vulnerabilidad asociada. Este planteamiento se realizó bajo la bases de una gobernanza climática que tiene como marco la Declaración de Emergencia Climática declarada por la Ciudad de Mendoza", explicó Vanina Bisogno, Jefa de Departamento de Cambio Climático y Planificación Estratégica. 

Lí­neas del PLAC 

Tomando como referencia la meta de reducción de emisiones presentada por el paí­s y acorde a lo establecido por el GCoM, Mendoza fija una meta de reducción de emisiones de gases de efecto de al menos un 18% (incondicional) con una proyección de alcanzar un 30% (condicionada a fuentes de financiamiento) respecto al escenario tendencial (Business as Usual), BAU al 2030, considerando las fuentes de emisión del alcance básico. De esta forma, en 2030, Mendoza no emitirá más de 629.918,22 tCO2e.

Para alcanzar esta meta se desarrollaron las siguientes estrategias, basadas en el Inventario de GEI del aí±o 2018 y en la Evaluación de Riesgos Climáticos. 

Estrategias de mitigación

El último inventario muestra un perfil de emisiones de GEI con un gran aporte del transporte terrestre, debido al consumo de combustible principalmente en los vehí­culos privados, alcanzando el 49% del total de las emisiones de GEI. En segunda instancia, los consumos energéticos en los sectores residenciales, comerciales e institucionales (incluyendo los edificios del sector público), suman un 34% debido al consumo de electricidad y de gas natural. Por último, el 14% es aportado por la disposición final de residuos los cuales son llevados a un relleno sanitario en el departamento de Las Heras.

A partir de este diagnóstico, la Municipalidad de Mendoza ha propuesto acciones para reducir las emisiones, algunas de las cuales se encuentran en ejecución. Entre ellas podemos destacar:

Energí­a

• Eficiencia energética y adopción a escala de tecnologí­a basada en una matriz energética limpia 
• Construcciones sustentables
• Programa de rehabilitación energética en dependencias municipales
• Camiones de riego: CO2 evitado por el cambio modelo de riego

Transporte

• Programa de movilidad sustentable:
• Ví­as exclusivas para transporte público bajo en emisiones.
• Peatonalización de sectores clave en la ciudad.
• Conducción eficiente.
• Promoción del uso compartido del vehí­culo
• Movilidad no motorizada en Licencia de Conducir.
• Movilidad no motorizada: cicloví­as y bicisendas.

Residuos

• Regulación de bolsas y plásticos de un solo uso
• Programa de gestión de residuos sólidos urbanos. 
• Lombricultura con residuos de poda y residuos orgánicos del sector gastronómico

Manejo sustentable

• Programa de Conservación de la Biodiversidad Urbana
• Conservación y uso sostenible del Piedemonte
• Bosque Urbano y re densificación con especies de bajo requerimiento hí­drico

Estrategias de adaptación

Efectos climáticos a futuro 

Dentro de las proyecciones para la provincia de Mendoza en término de los efectos negativos del Cambio Climático, se prevén fenómenos tales como precipitaciones torrenciales y remoción de masa. Al mismo tiempo se pronostican situaciones climáticas extremas como son: las sequí­as intensas o prolongadas y eventos asociados a estos, como son los incendios forestales. Asimismo, se estima un aumento en la frecuencia e intensidad de olas de calor, con impactos más intensos en zonas urbanas, debido a efectos sinérgicos. Esto generarí­a una mayor demanda de electricidad para refrigeración y posibles problemas de salud en la población. En consonancia con lo antes expuesto cabe destacar que, desde hace aí±os, Mendoza se ha visto afectada por la escasez de agua debido a una importante crisis hí­drica, que podrí­a traer en un futuro no muy lejano fuertes impactos en el sector agrí­cola y afectación en la generación de energí­a hidroeléctrica, pero también en la disponibilidad de agua para uso domiciliario.

En respuesta a los anteriores efectos representados en la evaluación de amenazas climáticas, se diseí±aron las siguientes lí­neas de adaptación:

• Soberaní­a alimentaria y huerta
• Programa de enfriamiento urbano
• Programa de gestión del riesgo de desastres:
• Gestión de riesgo de desastre. Reducción del riesgo.
• Reducción de amenaza aluvional en el piedemonte.
• Gestión de riesgo de desastre. Análisis del riesgo.
• Gestión intermunicipal de drenaje hí­drico urbano.
• Protección pluvial para Ciudad de Mendoza.