“Uno de los mayores beneficios de usar este tipo de productos es que cuidan a los animales (...), ayudan a cuidar el medio ambiente, evitan alergias y no son daí±ino con el cuerpo. Respeta el cuerpo humano y también el de nuestros animales, ya que este emprendimiento es 100% cruelty free.”

“El mayor reto fue el packaging: buscaba algo acordé a la marca, que fomente el cuidado del medio ambiente. No querí­a usar productos de plástico ni nylon. Por suerte hoy en dí­a hay emprendedores muy buenos que se inclinan por este tipo de necesidades y pude conseguir etiquetas biodegradables, envoltorios de harina de maí­z, envases reutilizables (...). Al principio no es fácil y es un proceso de cambios; vamos cambiando esto, después lo otro, etc.”

“Este emprendimiento nació en plena pandemia. Cuando empezó la cuarentena comencé a trabajar desde casa, eso me dio el tiempo para poder dedicarle y animarme a lanzar la marca (...). Si bien habí­a ciertos impedimentos como el correo, la mensajerí­a, locales cerrados dónde compraba materia prima, pude buscar otras opciones y animarme a crear Achilu. Nunca pensé que nos iba a ir tan bien! Porque por suerte hay mucha demanda de estos productos, el lanzamiento fue más bien una prueba, ahora ya vamos por los dos aí±os de Achilu y estoy muy contenta.”

“Creo que la gente a medida que pasan los aí±os va tomando más conciencia del cuidado del planeta y de uno mismo. Creció, a mi parecer, la demanda de productos naturales por todos los beneficios que conllevan, además que nos dejan tranquilos con que, a la vez, aportamos ese granito de arena que tanto necesita nuestro planeta.”

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